Beatriz Mella, directora del Magíster en Vivienda y Barrios Integrados y del Centro de Investigación CIUDHAD, de la UNAB, se refirió a la importancia de proyectos de transporte público que se tienen en carpeta en Chile.
Entre ellos, la ampliación de aeródromo Torquemada en la Región de Valparaíso que se espera inicie operaciones en 2027, el tren rápido a Chillán que ya hizo su estreno, y el impacto inmobiliario que proyectan para la nueva línea 7 del metro de Santiago.
Ampliación Aeródromo en la Región de Valparaíso
Reacciones encontradas produjo el anuncio del nuevo aeropuerto en la región de Valparaíso, a raíz de la ampliación del aeródromo de Torquemada, con una inversión de 76.000 millones de pesos.
Respecto a esto la directora del CIUDHAD UNAB, manifestó que, si bien se debe respetar las distintas opiniones, “en el contexto global esta es una noticia que no celebro tanto. Creo que es mucho más interesante cuando tenemos proyectos y vemos inversiones gigantescas en infraestructura de movilidad sostenible, que es hacia donde tenemos que apuntar.
Hoy en día estamos justo en un punto de inflexión donde cualquiera de las decisiones que se tomen en torno a la movilidad son muy delicadas, porque puede, de alguna manera, setear lo que va a seguir pasando en los años siguientes, y no en los dos años siguientes o en los cinco años, sino que en los próximos 30 años.
Cuando tenemos este tipo de proyecto, hay que ser súper cautos porque justamente van en la dirección opuesta a cómo nos movemos de manera más sostenible. Hoy día, por ejemplo, se espera que ese aeropuerto pueda tener unos 900.000 viajes de distancias muy cortas. No se trata de salvar con esto una distancia enorme y que, de alguna manera, la región de Valparaíso está completamente desconectada en términos de conectividad con el resto de la región”.
Tren Rápido a Chillán
Al ser consultada sobre este tema, la directora del nuevo Magíster UNAB, en Vivienda y Barrios Integrados, planteó que en este caso sí se trata de “un transporte sostenible. Lo interesante que pasa con las estaciones de tren es que efectivamente hay una conexión entre ciudades intermedias.
Cuando conectamos Santiago-Chillán, hay una serie de estaciones intermedias que también pueden recibir las ventajas de esta nueva conectividad, como más oportunidades de trabajo y de equipamientos que en estas ciudades más pequeñas no existen.
El tren va a significar un crecimiento radial. Espacios con servicios, con comercio, eventualmente entretención, haciendo ciudad en esos nodos”.
El impacto proyectado para la nueva línea 7 del metro
“Ya no nos podemos mover en auto en esta ciudad. Está cada vez más colapsado. Entonces yo creo que esta apertura de nuevas alternativas justamente lo que está mostrando es que la gente está dispuesta a moverse en transporte público cuando la infraestructura está bien hecha.
Entonces acá yo creo que esas cualidades que tiene el metro representan un ahorro de tiempo, pero también representa seguridad. Energía limpia, comodidad, mucho más que otro sistema”.
A lo anterior, la doctora en Planificación Urbana agrega que “para que ese sistema funcione necesitamos que, si vamos a tener una red estructurante de metro, que haya una red de buses que también puedan alimentar esas estaciones o que también incluso puedan liberar ciertos recorridos para que no sea necesario que todo Santiago se mueva en metro”.
Al referirse al desarrollo económico y urbano que se puede dar en torno a las estaciones, Beatriz asegura que “es súper importante que la coordinación con los municipios sobre qué es lo que pasa con las inversiones en el espacio público cerca de estas estaciones de metro, para que sea lo más provechosa posible”.
Magíster en Vivienda y Barrios Integrados
Este nuevo programa que comienza sus clases en agosto pertenece al Campus Creativo UNAB, y tiene una duración de cinco trimestres.
“La idea es que podamos abrir los ojos a ciertos temas de la ciudad, sobre todo para personas que de alguna manera han estado involucradas en planes, procesos, proyectos, incluso gente que simplemente le interesa la planificación urbana, y que necesitan herramientas para entender cómo el estado del arte o cuáles son las problemáticas, las conversaciones, los debates, los conflictos actuales.
A diferencia de otros magísteres, no necesitamos que todos sean arquitectos o que tengan algún background en diseño, sino que está muy abierto a antropólogos, sociólogos, ingenieros, constructores, economistas, urbanistas, arquitectos y más.
Todos los contenidos que vamos a ir viendo, en términos más teóricos, son aplicables también desde sus disciplinas”.
Beatriz Mella
Directora del Magíster en Vivienda y Barrios Integrados
